El confinamiento ha acelerado la adopción de medidas de digitalización, tanto en la realización del trabajo como en las relaciones interpersonales. Es probable que muchos puestos de trabajo tal y como los conocíamos hayan cambiado para siempre. En España, según Randstad en RRHH Digital, casi 4.500.000 de personas tienen trabajos susceptibles de ser realizados desde casa. Estas últimas semanas han sido, para muchas empresas, campos de pruebas para comprobar si la oficina digital es una opción sostenible para ellas.
Los primeros resultados parecen ser positivos para las empresas: según el estudio de softwarepara.net publicado por Equipos y Talento, aquellas compañías que han implantado el teletrabajo han obtenido un aumento del 22% en la productividad de sus trabajadores y una disminución del 60% en el absentismo, además de reducir un 20% la tasa de rotación de las plantillas.
El teletrabajo ha venido para quedarse
Si para algo sirven las crisis es para impulsar procesos de transformación requeridos. A pesar de contar con muchos defensores, el teletrabajo no había conseguido implantarse de manera significativa en las empresas españolas.
Antes de la crisis del coronavirus, el 8% de la población teletrabajaba algún día de la semana, según recoge un informe realizado por la consultora CEINSA. Pero el confinamiento lo ha acelerado todo. Según la encuesta de AxiCom en Equipos y Talento, el 93% de los trabajadores quiere mantener el teletrabajo incluso cuando volvamos a la normalidad.
La conciliación, en este caso, cumple un papel muy importante. Estas últimas semanas, muchas familias están tomando conciencia que puede haber lugar para que educación de los hijos, trabajo y cuidado del hogar compartan espacio y tiempo, sin afectar necesariamente a los resultados y el desempeño laboral. Aunque sea voluntario o necesario por circunstancias ajenas, el teletrabajo motivará a las empresas a considerar adaptaciones en muchos ámbitos para afrontar este nuevo paradigma. La red social Linkedin acaba de publicar un informe en el que se desprende que el 53% de los españoles manifiesta abiertamente haber tenido más tiempo de calidad para disfrutar de sus hijos y familia. Además el 30% afirma que se siente más productivo y creativo sin las interrupciones típicas del trabajo en la oficina”
Alertas y oportunidades para las empresas
Así pues, parece que el panorama obliga a las empresas a replantear la relación con los empleados, tanto física como emocional. El management de equipos, la medición de actividad, la comunicación interpersonal, el acceso a la información y su archivo, o los circuitos de validación van a tener que pasar por el canal digital, pero parece cada vez más claro que también lo tendrán que hacer los beneficios sociales, las herramientas de motivación y recompensa del desempeño.
Un equipo que está disperso en la distancia no puede ser organizado o gestionado como se ha venido haciendo hasta ahora. Los retos a los que se enfrentan las empresas responden a cómo dar respuesta a las necesidades de conciliación y reconocimiento de los empleados en teletrabajo.
Las oportunidades para las empresas son varias:
- Fomentar la autonomía de los empleados y desarrollar nuevas aptitudes (decisión, acción).
- Mejorar el clima laboral.
- Premiar de verdad el resultado, por encima del presencialismo.
- Fomentar hábitos productivos en reuniones de trabajo.
- Crear nuevos momentos de socialización entre personas y equipos.
- Adaptar las herramientas de management hacia una mejor planificación, organización y flujo de información.
- Reforzar el papel de los managers de “primera línea” y llevar planes de dirección por objetivos.
- Personalizar el desarrollo profesional
- Optimizar los gastos de la empresa.
Cómo motivar a los empleados en teletrabajo
- Redefinir objetivos. Es necesario, primero de todo, establecer objetivos a corto, medio y largo plazo, tanto en el plano corporativo como individual. Estos objetivos deben ser evaluables cada poco tiempo y comunicados de forma clara a los equipos.
- Establecer nuevas formas de medir resultados, evitando fórmulas pasadas que se basaban en el presencialismo o las apariencias. El management por objetivos cobra más sentido que nunca, así como la evaluación de su cumplimiento. Por ejemplo, se podrá trabajar con encuestas internas y externas de satisfacción, balancear entre objetivos cualitativos y cuantitativos, establecer comparativas entre equipos y datos sectoriales, medir periódicamente la evolución de cada uno, organizar concursos o comunicar retos, etc. Objetivo: evitar comportamientos como el detectado en el informe de Linkedin, donde el 21% de los españoles encuestados dice haber enviado correos electrónicos a primera hora de la mañana o por la noche para “parecer” ocupado.
- Cimentar las relaciones laborales a pesar de la distancia, fomentando el espíritu de empresa y el compañerismo: eventos virtuales, momentos de “socialización” dentro de la empresa (“café virtual”, charlas, inicio y final de la semana, llegada y despedida de compañeros, vuelta de vacaciones, etc). La reunión virtual no es sólo una herramienta de trabajo, ya que puede contribuir a reducir la sensación de soledad ante la ausencia de contacto con compañeros, como señala el 39% de los encuestados por Linkedin.
- Celebrar éxitos colectivos de forma más visible: establecer recompensas por el cumplimiento de objetivos de venta, de proyectos, o resultados corporativos ayuda a que todos los integrantes del equipo se sientan reconocidos e importantes. Para ello, la empresa deberá sustituir, al menos en algunas ocasiones, las habituales celebraciones presenciales por espacios virtuales: charlas online, webinars interactivos, vídeos corporativos, redes sociales internas y foros, intranets de mayor contenido…
- Implicar a los mandos intermedios y ayudarles a adaptar su management. Ellos son fundamentales para transmitir los mensajes claves, evaluar la contribución de cada empleado al resultado global y desarrollar relaciones de tú a tú.
- Generar vínculos emocionales empleado-empresa desde la distancia. Se necesita trabajar en la cercanía de la empresa con cada persona, desarrollando la imagen de marca y el orgullo de pertenencia de los equipos, buscando herramientas que en la distancia sean elementos vertebradores: visión y estrategia de la empresa, valor añadido para los clientes y usuarios, proyectos de RSC/Solidarios que involucren a la plantilla, consecución de metas, anuario digital de la plantilla, oferta de e-formaciones más individualizadas, gamificación, reconocimientos entre empleados…
- Usar métodos de compensación, beneficios y recompensas adaptados a todos y que vayan más allá de la nómina, fría y distante cuando los importes no suponen cuantías elevadas. Muchas de las herramientas actuales quedarán obsoletas con el desarrollo del teletrabajo, ante todo las que tienen lugar en el entorno de la oficina, y las empresas deben orientar sus medidas hacia beneficios “a la carta” (los cafeteria plan), de fácil acceso en remoto, y flexibles en cuanto a un uso más personal.
El valor añadido de Click&Gift: digitalizar las recompensas
La tarjeta regalo digital Click&Gift, que se envía por email a los beneficiarios, es ya la solución de muchas empresas para premiar a sus empleados estén donde estén y de manera instantánea: permite personalizar el incentivo (imagen, mensaje, destinatario), es canjeable en muchas tiendas virtuales o físicas, y en definitiva se adapta a todo tipo de públicos y situaciones.
La recompensa recibida por el empleado podrá ser usada en más de 100 marcas online y offline, asegurando la adaptabilidad a todos los gustos de los empleados: Amazon, El Corte Inglés, Decathlon, Mango, Ikea, Atrápalo, The Phone House, Just Eat, Privalia, Casa del Libro, Mediamarkt, Fnac, Wonderbox, entradas de cine, cestas de Navidad, y mucho más. El acierto seguro.
Nuestro equipo de expertos está a tu disposición para ayudarte a digitalizar tus incentivos y recompensas.